Dejarme solo darle las gracias por esta estupenda crónica que ayuda a conocer el sentir de los atletas en competición... Sin duda, ella se ha erigido en la alegría de la huerta del club... y con gente así da gusto competir, entrenar y leer tus crónicas.
Campeonato de España Campo a Través por Clubes:
Disfrutar es lo único que puedes hacer mañana, fue lo último que pensé antes de cerrar los ojos el sábado... ¡Corríamos el Campeonato de España!
Llevo disfrutando del correr desde que tengo uso de razón, pero con una anarquía digna de estudio, y siempre le he tenido a la competición mas miedo que vergüenza, así que el día que nos clasificamos para el campeonato de España, se me plantearon varios retos, muy serios. Esta vez todo me sonreía, ya que cuento con el apoyo de una entrenadora que consigue que no pueda dejar de ir a entrenar, y que cada vez disfrute mas de mi mejor estado de forma. Mi equipo es tan especial que consigue espantar a todos mis fantasmas, y lo que antes era presión se convierte en ilusión y ánimo para sacar todo lo mejor que tengo en mis piernas...
El día amaneció soleado, según avanzaba aumentaba el calor, y a pesar de mi buena compañía iba necesitando la protección del equipo y de las compañeras. Nada mas llegar al hipódromo apareció Cris, el motivador oficial del Canguro, (tú sí que eres grande!) Juntos nos dirigimos hacia la carpa y en el camino apareció mi capitana favorita rodeada de su encantadora familia, Patricia siempre reconoce su nerviosismo pero siempre me consigue serenar.
Al fondo del hipódromo, detrás de dos carpas, se encontraba la nuestra. De pronto aparecieron todos los canguros con ambiente de fiesta. La carpa parecía un hogarcito, y no lo digo por la cantidad de canguritos que había merodeando la zona... El equipo hizo honor a su nombre y no nos dejaron ni colgarnos el dorsal a las que corríamos, GRACIAS! Lourdes mientras organizaba documentaciones y ponía orden al alborotado equipo, me da la mano a la vez que los dorsales para que me relaje.
Entre fotos y más fotos, -A las doce y veinte aquí! -a calentar! -¿Dónde están el resto?,
todos de aquí para allá , menos Antonio que siempre parece tranquilo . Así que nos fuimos a calentar y al baño, juntándonos Inma, Elsi, Isabel, Soraya, Patricia y yo, que a pesar de los nervios teníamos sonrisas para todo y para todos. Calentando me iba dando cuenta de que no seríamos las mejores corriendo pero desde luego llevábamos las equipaciones y el grupo de chicas más guapas de todo el campeonato. Al llegar a la salida, y cómo viene siendo habitual, dimos un poquito la nota, jeje!, si no son las del Fuenla que se encaran a Inma por el cajón, es uno de los árbitros que piensa que nos hemos colado, pero al tener mas salidas que el metro de Avenida de América, todo cómo siempre se queda en unas risas y alguna anécdota para contar...
La verdad es que somos unas privilegiadas, ya que a pesar de estar trabajando Fernando Marquina y Andrés Matías tuvieron unas dulces palabras y ánimos para nosotras, que mientras nos poníamos los clavos (algunas por primera vez) nos íbamos preparando para entrar en los cajones, y sólo allí se decidió quien iba a encabezar la batalla, Patri, Inma y Elsi, iban a ser las primeras así que ¡delante a dar la cara!, mientras Isabel, Soraya y yo teníamos que cubrir las espaldas, por lo que nos colocamos en la retaguardia. De pronto los chicos clasificados en el último momento, más que merecidamente, aparecen. Raúl, Antonio, Lucas, Victor y Javi, acompañados por Pepe, ¡que alegría de compañía!, dos minutos y zas! La salida.
Bien me había avisado mi manager favorito que dejara escapar al ganao que si no iba a quedar muy trasquilada, y así hice, colocarme a la cola que para adelantar siempre hay tiempo. Sí, podía tener buenos entrenos en las piernas pero cómo bien sabéis todos a competir se aprende compitiendo y mujer prudente vale por dos, así que a “mantener la calma y a ver las espaldas der ganaó”. Al ratín avisté a Soraya e Isabel un poquito mas adelante, a lo lejos dos canguras. Eran Inma y Elsi que ya habían tomado la curva e iban adelantando puestos, por lo que Patri tenía que estar dejando el pabellón bien alto. Al dar la curva me encuentro con Isabel y Soraya, intercambio de ánimos y prosigo la carrera en compañía de Soraya, a la que sugiero que marque el ritmo ella, pues a mi eso no se me da bien, todavía, claro. Llegamos a la zona donde empieza a haber público y se oyen ya muchas voces y por primera vez descubro eso que siempre he negado, los ánimos te animan! De pronto la voz de mi entrenadora que me pide un poquito más de esfuerzo, lo intento, pero no soy consciente de mis fuerzas, sólo del calor y de la sed que comienzo a padecer. Mi compi me desvela su sensación de flato y a pesar de los ánimos de Cris, me anima para que yo siga, buf! Se me hace duro separarme y me siento sola ante el peligro, veo una fila de chicas y dudo. Si aprieto un poquito y las cojo, puede que me marquen el ritmo, pero también puede que gaste un cartucho y me tenga que parar, pero lo hago. El calor y la sed me agobian, ese sentimiento de qué hago aquí, porqué tengo que pasar ésto, surgen en mi cabeza con la imagen de la Nuri, así que me doy cuenta de que no llevo bien eso de sufrir, y acordándome de los entrenamientos en Vallehermoso cuando Antonio Morales me hablaba de eso del gusto a sufrir que se practica tanto en el atletismo (y en la vida) y voy llegando a la zona de público.
Bueno, ya queda poco, sé que debo quemar el último cartucho pero me contengo, quiero agua, pero no hay zona de avituallamiento por aquí! “Jeje, es que en el atletismo español, no se invierte ná de dinero!, y de pronto e inesperadamente una cuestecita, que poca gracia me hizo, me acordé de la que había en el campeonato de Madrid cuando alguien me gritaba eso de “son doscientos metros”, y me quise parar, el mismo sentimiento que tuve en este momento, así que ¡a hacer tobillos y pelea con la chepa que hay que dejar que entre el aire!, venga, ahí está, ya llego tarde para esprintar! Joer!, no tengo fuerzas pero aparecen a la izquierda y a la derecha al unísono con un Albita vamos! Antonio Alix, al que me cuesta reconocer y a la Nuri, que también me recuerda eso del sprint, y no sé de dónde me salieron fuerzas para esprintar de una manera insana hasta alcanzar meta, con un sentimiento de sed y de humedad que me obligaba a tirarme a la hierba. De pronto apareció Tomas para atender cualquier cosa que me hubiese pasado con un trago de Gatorade. Una vez refrescada, pá lante en búsqueda de las chicas. A la primera que vi fue a Patricia, luego Inma y Elsi, habían sufrido aún mas que yo, pero no faltaron risas y sonrisas, jaja, comentando la jugada, aparece Cris con la cámara para tomar la imagen, rápido porque salían los chicos, nos juntamos ya todas y foto del después para contrastar con la del antes. Todas corriendo al encuentro con la manada. Felicitaciones sonrisas, y a continuar animando a los chicos.
Me llegan noticias de la mano de Pepe Bodas, aunque pensaba haber corrido los 50m más rápidos de mi vida, me faltaron diez segundos para que nos hubiésemos clasificado. Un poco de pena me invade, que se disuelve, con la alegría de ver tantos niños pequeños y grandes disfrutando de un día de sol, en el hipódromo viendo galopar a atletas de todas las edades y lugares de España. Sobre todo me quedo con la satisfacción del presi Morales. Y el próximo años esperamos completar el equipo femenino de corto y largo, porque chicas con calidad en este club hay un montón.
Llevo disfrutando del correr desde que tengo uso de razón, pero con una anarquía digna de estudio, y siempre le he tenido a la competición mas miedo que vergüenza, así que el día que nos clasificamos para el campeonato de España, se me plantearon varios retos, muy serios. Esta vez todo me sonreía, ya que cuento con el apoyo de una entrenadora que consigue que no pueda dejar de ir a entrenar, y que cada vez disfrute mas de mi mejor estado de forma. Mi equipo es tan especial que consigue espantar a todos mis fantasmas, y lo que antes era presión se convierte en ilusión y ánimo para sacar todo lo mejor que tengo en mis piernas...
El día amaneció soleado, según avanzaba aumentaba el calor, y a pesar de mi buena compañía iba necesitando la protección del equipo y de las compañeras. Nada mas llegar al hipódromo apareció Cris, el motivador oficial del Canguro, (tú sí que eres grande!) Juntos nos dirigimos hacia la carpa y en el camino apareció mi capitana favorita rodeada de su encantadora familia, Patricia siempre reconoce su nerviosismo pero siempre me consigue serenar.
Al fondo del hipódromo, detrás de dos carpas, se encontraba la nuestra. De pronto aparecieron todos los canguros con ambiente de fiesta. La carpa parecía un hogarcito, y no lo digo por la cantidad de canguritos que había merodeando la zona... El equipo hizo honor a su nombre y no nos dejaron ni colgarnos el dorsal a las que corríamos, GRACIAS! Lourdes mientras organizaba documentaciones y ponía orden al alborotado equipo, me da la mano a la vez que los dorsales para que me relaje.
Entre fotos y más fotos, -A las doce y veinte aquí! -a calentar! -¿Dónde están el resto?,
todos de aquí para allá , menos Antonio que siempre parece tranquilo . Así que nos fuimos a calentar y al baño, juntándonos Inma, Elsi, Isabel, Soraya, Patricia y yo, que a pesar de los nervios teníamos sonrisas para todo y para todos. Calentando me iba dando cuenta de que no seríamos las mejores corriendo pero desde luego llevábamos las equipaciones y el grupo de chicas más guapas de todo el campeonato. Al llegar a la salida, y cómo viene siendo habitual, dimos un poquito la nota, jeje!, si no son las del Fuenla que se encaran a Inma por el cajón, es uno de los árbitros que piensa que nos hemos colado, pero al tener mas salidas que el metro de Avenida de América, todo cómo siempre se queda en unas risas y alguna anécdota para contar...
La verdad es que somos unas privilegiadas, ya que a pesar de estar trabajando Fernando Marquina y Andrés Matías tuvieron unas dulces palabras y ánimos para nosotras, que mientras nos poníamos los clavos (algunas por primera vez) nos íbamos preparando para entrar en los cajones, y sólo allí se decidió quien iba a encabezar la batalla, Patri, Inma y Elsi, iban a ser las primeras así que ¡delante a dar la cara!, mientras Isabel, Soraya y yo teníamos que cubrir las espaldas, por lo que nos colocamos en la retaguardia. De pronto los chicos clasificados en el último momento, más que merecidamente, aparecen. Raúl, Antonio, Lucas, Victor y Javi, acompañados por Pepe, ¡que alegría de compañía!, dos minutos y zas! La salida.
Bien me había avisado mi manager favorito que dejara escapar al ganao que si no iba a quedar muy trasquilada, y así hice, colocarme a la cola que para adelantar siempre hay tiempo. Sí, podía tener buenos entrenos en las piernas pero cómo bien sabéis todos a competir se aprende compitiendo y mujer prudente vale por dos, así que a “mantener la calma y a ver las espaldas der ganaó”. Al ratín avisté a Soraya e Isabel un poquito mas adelante, a lo lejos dos canguras. Eran Inma y Elsi que ya habían tomado la curva e iban adelantando puestos, por lo que Patri tenía que estar dejando el pabellón bien alto. Al dar la curva me encuentro con Isabel y Soraya, intercambio de ánimos y prosigo la carrera en compañía de Soraya, a la que sugiero que marque el ritmo ella, pues a mi eso no se me da bien, todavía, claro. Llegamos a la zona donde empieza a haber público y se oyen ya muchas voces y por primera vez descubro eso que siempre he negado, los ánimos te animan! De pronto la voz de mi entrenadora que me pide un poquito más de esfuerzo, lo intento, pero no soy consciente de mis fuerzas, sólo del calor y de la sed que comienzo a padecer. Mi compi me desvela su sensación de flato y a pesar de los ánimos de Cris, me anima para que yo siga, buf! Se me hace duro separarme y me siento sola ante el peligro, veo una fila de chicas y dudo. Si aprieto un poquito y las cojo, puede que me marquen el ritmo, pero también puede que gaste un cartucho y me tenga que parar, pero lo hago. El calor y la sed me agobian, ese sentimiento de qué hago aquí, porqué tengo que pasar ésto, surgen en mi cabeza con la imagen de la Nuri, así que me doy cuenta de que no llevo bien eso de sufrir, y acordándome de los entrenamientos en Vallehermoso cuando Antonio Morales me hablaba de eso del gusto a sufrir que se practica tanto en el atletismo (y en la vida) y voy llegando a la zona de público.
Bueno, ya queda poco, sé que debo quemar el último cartucho pero me contengo, quiero agua, pero no hay zona de avituallamiento por aquí! “Jeje, es que en el atletismo español, no se invierte ná de dinero!, y de pronto e inesperadamente una cuestecita, que poca gracia me hizo, me acordé de la que había en el campeonato de Madrid cuando alguien me gritaba eso de “son doscientos metros”, y me quise parar, el mismo sentimiento que tuve en este momento, así que ¡a hacer tobillos y pelea con la chepa que hay que dejar que entre el aire!, venga, ahí está, ya llego tarde para esprintar! Joer!, no tengo fuerzas pero aparecen a la izquierda y a la derecha al unísono con un Albita vamos! Antonio Alix, al que me cuesta reconocer y a la Nuri, que también me recuerda eso del sprint, y no sé de dónde me salieron fuerzas para esprintar de una manera insana hasta alcanzar meta, con un sentimiento de sed y de humedad que me obligaba a tirarme a la hierba. De pronto apareció Tomas para atender cualquier cosa que me hubiese pasado con un trago de Gatorade. Una vez refrescada, pá lante en búsqueda de las chicas. A la primera que vi fue a Patricia, luego Inma y Elsi, habían sufrido aún mas que yo, pero no faltaron risas y sonrisas, jaja, comentando la jugada, aparece Cris con la cámara para tomar la imagen, rápido porque salían los chicos, nos juntamos ya todas y foto del después para contrastar con la del antes. Todas corriendo al encuentro con la manada. Felicitaciones sonrisas, y a continuar animando a los chicos.
Me llegan noticias de la mano de Pepe Bodas, aunque pensaba haber corrido los 50m más rápidos de mi vida, me faltaron diez segundos para que nos hubiésemos clasificado. Un poco de pena me invade, que se disuelve, con la alegría de ver tantos niños pequeños y grandes disfrutando de un día de sol, en el hipódromo viendo galopar a atletas de todas las edades y lugares de España. Sobre todo me quedo con la satisfacción del presi Morales. Y el próximo años esperamos completar el equipo femenino de corto y largo, porque chicas con calidad en este club hay un montón.
Alba Violeta Pernil
La crónica le corresponde a otra, esta vez, pero no puedo evitar
ResponderEliminarhacer el comentario tras ver tu gran reportaje gráfico y el enoorme
apoyo de todos los canguros, con tienda de alto nivel (qué montaje
tan estupendo) y asistencia técnica de luxe por parte de los que
corrían y gente como Pepe, Lourdes, Clara, Andrés y todos los que
vinistéis a animarnos. Gracias. Con una motivación semejante los
chicos y chicas no podíamos hacerlo mal, había que poner al menos
toda esa ilusión. No me extraña que llevéis dando la vara más de 50
años... Ojito a las chicas que estamos a punto de organizarnos y la
vamos a liar. El próximo año, tortillas.